Jueves, 10 de la noche pasadas. Después de cenar y de la preceptiva ronda de zapping, nos damos cuenta de que no hacen gran cosa, al final optamos por un canal donde ponen CSI Miami (bueno, quizá un poco pasado, pero es que cuando se descubrió teniamos vetada Tele 5 por "telebasurera"). Yo, como soy capaz de abstraerme de la tele si no me acaba de hacer el programa, cojo mi libro dispuesto a sumergirme en el. Pero algo me hace dejarlo y prestar un poco de atención: un concejal de urbanismo es asesinado en una casa deshabitada. "Eso me suena", me digo para mis adentros. Poco a poco los agentes van descubriendo verdades: esa zona del barrio estaba catalogada como peligrosa, por lo que el Ayuntamiento iba a expropiar las viviendas para venderlas a una empresa privada "coño" me digo "como el Cabañal!" Después de entrevistarse con el empresario y de sacar un par de conclusiones respecto unas pruebas antiguas de casos de vandalismo, descubren que el propio empresario ha degradado el barrio para que el Ayuntamiento de la zona proceda a actuar "probablemente también haya comprado a alguien dentro del mismo". Mientras, los propietarios acuden a la vista que ha de fijar el "justo precio" por sus viviendas, que por supuesto, ha sido convocada en el lugar mas escondido posible. El juez de turno, como es de prever, tasa un precio muy inferior al de la realidad, los propietarios se rebelan porque con ello no pueden pagar una nueva vivienda (de repente empiezo a creer que está basado en hechos reales). Finalmente, el concejal de urbanismo ha sido asesinado por un joven despechado porque se habia (presuntamente) tirado a su madre, o sea, que cuando pensaba que la trama se volveria mas interesante con conexiones a politicos corruptos, los guionistas se quedan sin ideas o sin tiempo (mas bien lo segundo); sin embargo acaban achacando un asesinato al juez que dictó las indemnizaciones (con lo que pretenden demostrar que cuando uno es corrupto, no le importa tirarse a una demandante mexicana y matar a su hija "extramatrimonial") por lo que el plan urbanístico se anula y los vecinos vuelven a vivir felices en sus casas.
Visto lo visto, solo me quedan tres dudas: o la realidad supera la ficción, o los guionistas son unos fenomenos, o simplemente han estado una temporadita por Marina d'Or inspirandose.
Hasta otro dia, visitantes de Franxapaworld!
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