dijous, de novembre 27, 2008

Espejismos

Mientras me abalanzo sobre ella voy cayendo en la cuenta de que quizá el angelito del hombro izquierdo tiene razón, que no es real. En el fondo ya lo sabía: Es extraño encontrar a tu “media naranja” de improviso, en la misma parada en la que coges el bus todos los días. Es extraño sólo encontrarla ahí, a pesar de ir siempre a los mismos eventos, es extraño que alguien coincida contigo en todo. Pero nunca quise creerlo, en lugar de eso le dije la besaría y ante su silencio, cerré los ojos y me abalancé sobre ella.