divendres, de setembre 11, 2009

¿Magia?

El mago se arremangó, hizo cuatro pases mágicos y, de repente, sacó un ramo de flores enorme de las manos. El público aplaudió a rabiar, mientras el mago saludó de nuevo y se dispuso a preparar el siguiente truco. Mi vecino de asiento se extrañó un poco por mi poca efusividad aplaudiendo y me preguntó la razón.
- Es un truco, ha hecho que nuestros ojos se fijaran en un punto para que no veamos lo que sucede en otro
- Ah, ya entiendo, usted es mago
- No señor, yo veo telediarios

El señor se quedó si cabe más sorprendido que antes, así que le invité después de la función (porque es de muy mala educación hablar mientras otro actúa) a tomar unas cañas mientras se lo explicaba.
- Ese truco no es exclusivo de los magos, en realidad es de los más antiguos del mundo. Los políticos lo usan a gran escala y continuamente: mientras dicen algo para distraer tu atención hacen lo que realmente quieren hacer. Naturalmente, hay que estar muy atento para descubrirlo y siempre lo haces tarde, pero eso no quita que sepas que, a la siguiente vez, hay gato encerrado.

Como que mi nuevo amigo seguía siendo algo susceptible tomamos prestado el periódico del bar, y pudo ver como por una parte te enseñan el Circuito de F1 para que no veas como se construye un nuevo colegio formado íntegramente por barracones, o como muestran el proyecto de la Ciudad de las Lenguas y bajo mano planifican el “Resort” con campos de golf donde realmente se hablarán de esas lenguas. Y piden dinero a otras administraciones para confrontar y que no se sepa que a pesar de que Mundo Ilusión ha quedado aparcado se siguen gastando dinero público en ello, sin saber muy bien a donde va a parar, o se “pierden” cajas con pruebas judiciales como por arte de magia… Tanto se convenció de que en realidad los políticos son magos que estuvo mirando y mirando las páginas intentando buscar la excepción, y por supuesto, encontrándola.
- Pero éste no hace esas cosas
- Claro que no, porque él no es un mago, no engaña. Rus dice que lo hará porque es así de chulo y a quien no le guste que no mire, y efectivamente, así lo hace. Y la gente le aplaude igual…